Tras ser aprobada en el Congreso de la Unión, la reforma constitucional requiere la aprobación de al menos 17 congresos estatales para su promulgación. El estado de Oaxaca ha sido el primero en hacerlo.
Horas después de que el Senado de la República dio su visto bueno a la reforma constitucional del Poder Judicial de la Federación (PJF), el Congreso de Oaxaca también aprobó las modificaciones, convirtiéndose en el primer congreso estatal en hacerlo.
Con 41 votos a favor y ninguno en contra, los diputados oaxaqueños respaldaron la reforma, con el apoyo del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), sus aliados, y miembros de la oposición, como el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD).
Sergio López Sánchez, presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso de Oaxaca, subrayó que su estado fue el primero en aprobar la modificación constitucional. Expresó la esperanza de que la reforma sea ratificada pronto, lo que permitiría “garantizar una justicia pronta”.
El legislador de Morena destacó que esta reforma facilita el acceso a la justicia social y negó que atente contra la autonomía e independencia del Poder Judicial, argumentando que serán los ciudadanos quienes elegirán a los jueces y magistrados.
Después de ser avalada por la Cámara de Diputados y el Senado, la reforma debe ser ratificada por al menos 17 congresos estatales para su promulgación en el Diario Oficial de la Federación (DOF). Esto permitiría establecer las modificaciones impulsadas por el Poder Ejecutivo federal.
La reforma establece la elección de jueces, magistrados y ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN). Además, reduce de 11 a 9 el número de ministros en la sala superior y acorta su periodo de 15 a 12 años. La renovación del Poder Judicial está prevista para 2025 y 2027, sustituyendo al Consejo de la Judicatura Federal (CJF) por un Tribunal de Arbitraje.