Por: La Redacción.

Ciudad de México., 21 de julio del 2024.- Cada persona genera al día 0,74 kilos de residuos. Y en los próximos años se espera que este dato aumente. El viejo paradigma de producir, usar y tirar está inundando el mundo de basura. Soluciones como la reutilización, el reciclaje y la valorización energética cobran más importancia que nunca. En el lugar donde la basura genera más daños, el Tercer Mundo, los residuos electrónicos se han convertido en un gran negocio.

Los datos no mienten: a nivel mundial, cada persona genera 0,74 kilos de residuos al día. Al mismo tiempo, en el mundo se generan 2.010 millones de toneladas de residuos sólidos urbanos cada año, el 33% de los cuales no son gestionados de manera ecológicamente segura. Y para 2050 se espera que esta cifra aumente hasta los 3.400 millones de toneladas.

También existe una correlación directa entre la generación de residuos y el nivel de rentas: aunque solo representan el 16% de la población mundial, los países con rentas altas producen alrededor del 34% de los residuos mundiales 683 millones de toneladas.

Los países con rentas medias-altas y medias-bajas producen el 32% y el 29%, respectivamente. Y los países con rentas bajas, que representan el 9% de la población, solo son responsables del 5% de los residuos mundiales.

Aunque son quienes menos residuos producen, la falta de desarrollo y la inestabilidad política en el Tercer Mundo han obstaculizado la implantación de modernos sistemas de gestión de la basura en muchas áreas.

Según el Banco Mundial, mientras los países con rentas altas y medias-altas proporcionan normalmente servicios universales de recolección de residuos, los países con rentas bajas solo recolectaron en 2016 el 48% de los residuos generados en las ciudades y el 26% fuera de ellas. Esta situación crea condiciones de vida insalubres, favorece la transmisión de enfermedades e incluso provoca que alguna gente pierda sus casas o hasta la vida en avalanchas de basura.

Esta proliferación de basura es consecuencia del viejo paradigma de la economía lineal: producir, usar y tirar. Hoy día, la economía circular reducir, reusar y reciclar se vislumbra como la única solución para vivir en entornos sostenibles, sanos e inclusivos. Y en este sentido todavía queda mucho camino por recorrer. A nivel mundial, solo se recuperan el 13,5% de los residuos a través del reciclado y el 5,5% a través del compostaje.

Los países con rentas altas son los que más basura recuperan un 29% a través del reciclado y un 6% a través del compostaje y los países con rentas bajas son los que menos basura tratan: tan solo son capaces de recuperar un 4% entre el reciclado y compostaje.