Luis de Llano ha perdido la apelación que interpuso ante el Poder Judicial de Ciudad de México después de ser condenado por dañar la integridad física, el honor, la dignidad y la intimidad de la cantante Sasha Sokol cuando ella tenía 14 años y él, 39.
La artista ha dado a conocer que el Tribunal Superior de Justicia de Ciudad de México confirmó la sentencia que realizó hace unos meses y amplió los efectos de la condena. “Lo comparto con ánimo y esperanza porque tiene enorme relevancia para quienes fuimos víctimas de abuso infantil, ya que reconoce la ilegalidad y el daño que estos hechos causan, aunque hayan sucedido hace décadas”, escribió a través de su cuenta de X (la red social antes conocida como Twitter).
La denuncia de Sokol fue interpuesta a través de la vía civil y no de la penal por haberse cometido hace casi 40 años y haber prescrito. Hace dos semanas, la Cámara de Diputados aprobó por unanimidad que los delitos sexuales en contra de menores en México ya no pueden prescribir y, por lo tanto, pueden ser juzgados sin importar el tiempo que transcurra. Se trata de un paso fundamental que garantiza la protección de las víctimas debido a que la mayoría tarda mucho tiempo en denunciar una agresión de este tipo.
La cantante que ahora tiene 52 años, alcanzó la fama en los ochenta con la banda de pop Timbiriche. De Llano fue durante aquella época su mánager y la personas que dirigía su carrera artística.
En una entrevista reciente , Sokol explicaba que tardó mucho tiempo en comprender que el productor disfrazó de afecto su abuso. “Yo tenía normalizada esta relación por el nivel de manipulación y grooming que viví. Estar con él me hacía sentir una niña especial (…) como otras víctimas de abuso, tardé mucho tiempo en tomar conciencia sobre lo que viví”, relataba a este diario.
A través de sus abogados, pudo acreditar el abuso que representó aquella relación y la revictimización que sufrió años después cuando De Llano comentó en un programa de televisión que había llegado a enamorarse de la adolescente y que la relación era consentida. “Cada vez que habla de mí, es una forma de abuso. Si esto se limitara a lo que sucedió hace tres décadas, ¿crees que hablaría con el dolor con el que hablo hoy? La relación de abuso no termina cuando deja de haber contacto sexual”, afirmaba.
La sentencia que la dio la razón a Sokol considera que lo declarado por el productor, que llegó a ser uno de los hombres más poderosos de la televisión mexicana, constituye un acto de revictimización y en consecuencia, lo condena, entre otras cosas, a realizar una disculpa pública, a abstenerse de volver a hablar de lo sucedido y a pagar una indemnización de la que se desconoce la cantidad. La cantante ha dicho que destinará esa suma a una organización para mujeres maltratadas.
Sokol acusó por primera vez públicamente a De Llano un 8 de marzo, el mismo día en miles de mujeres marchaban en México contra la violencia machista. Lo hizo con un mensaje en Twitter: “Escribo esto llorando. Ya no puedo —ni debo— guardar silencio”. “Él era un hombre poderoso en la industria; mi representante y mi productor. Yo tenía mucho miedo que al separarnos mi carrera se viera lastimada”, dijo Sokol. Desde entonces, cada uno de sus mensajes ha sido un nuevo capítulo que muestra lo difícil que es para las víctimas denunciar el abuso sexual infantil. “Desde los 14 años quise creer que fui responsable de lo que pasó. Hoy comprendo que mi única responsabilidad fue guardar silencio. Mientras mujeres en mi situación no nos atrevamos a hablar con la verdad, seguirá habiendo hombres como Luis de Llano”, dijo entonces.
Tras el silencio roto y la condena firme a su agresor, Sasha Sokol espera que su caso sirva para “traer a un tema tan oscuro un poco de luz” y que cada vez haya menos casos de abusos a menores. “Los pederastas podrán seguir usando recursos legales para aplazar el cumplimiento de su condena; pero mientras las autoridades sigan cerrándoles las salidas y las víctimas sigamos alzando la voz, serán menos los casos de abuso y más los abusadores condenados”, ha escrito en redes sociales.